Datos personales

Buenos Aires, Argentina
Buenos Aires, Argentina Demetrio Iramain nació en Buenos Aires, en mayo de 1973. Es poeta y periodista. Tiene algunos libros de poemas publicados, otros permanecen inéditos, y algunos textos suyos integran tres antologías poéticas editadas en el país. Dirigió la revista Sueños Compartidos y actualmente, ¡Ni un paso atrás!, ambas de la Asoiación Madres de Plaza de Mayo. Es columnista de Tiempo Argentino y Diario Registrado. En radio, co conduce el programa Pra frente (P’frenchi), en la AM 530, La Voz de las Madres.

Poemas de mi yo concurrido


a Lito


























la realidad también es la raíz cúbica de la poesía
el extremo alegre de todo lo contrario
eso bello inexplicable que aún no sucede




sarnas


a la poesía le creció sarna
en los dientes sarro y
sin embargo entre 20 y 30
hombres o mujeres según
es posible ver diariamente
en la puerta de la poesía

revuelven raspan con palitos
un hueco profundo
partes de la piel sin cuerpo adentro
misterios mientras

afuera puede estar lloviendo tiros
la muerte se paseara saludando por ahí 
o una mujer o varios

esto explica por qué otras circunstancias
del mundo no han podido
tener nunca nada con la poesía
y menos torcerla como
tristeza desafiada por ginebras

no obstante ello insisten en
extraña relación que sucede
los tiros la muerte una mujer
o los tres a la vez pero

a la poesía no le interesa eso
ni otras cuestiones por el estilo 
la poesía es siempre otra cosa
ejemplo: a mi pueblo lo mataron
con compañeritos adentro y
ahora está en la calle otra vez y

era la poesía




esfínteres


poesía se fue sin saludar
toda la noche estuvo contando
la distancia entre un infinito y otro
durmió el sueño de los justos
sin pegar un ojo después

se fue sin saludar

adónde estará ahora haciendo
venir la tormenta

nos hemos quedado un poco sorprendidos
del todo no porque ya nos habían contado sobre ella
su terca deslealtad salió en policiales   

por lo demás poesía siempre amó con sus esfínteres
dejó olvidos en la espalda del día
para que otros la nombren con su malasuerte

ahora poetas seguirán llamando palabras
reclamándoles que acudan en consuelo o
representación no obstante 

poesía se fue sin saludar como
visiones que oye el ciego en las heridas
cuando hay olor a una mujer pero

después va y llueve











diciembre 20

a Néstor Kohan


en este consomé adonde cuece
sus sueños el pueblo ahora hierven
caldos meados por la lluvia
rabias fermentadas hasta punto alcohol
veces que estuví con vos a solas
lejos del sol a oscuras de vientos que
vertían su furia en el sur
ajenos casi siempre a pernos que zurcían
deseo y deber ser a su manera como
botamangas rengas altas de pierna izquierda
así: por cada dos deseos un sano juicio
y a veces nadie 

o sea: misteriosamente
de a pasiones como campito que
da a la siesta donde una vez
jugaron cabeza y corazón
por su hegemonía política y
ganó corazón en gol de oro  
¿por eso nuestra tragedia contemporánea?
¿la ventura de nos estaba escrita justo
en ese machete extraviado de dios? 
a la final tardamos de más y costó sangrías
compañeros que aún secan
sus agujeros roncos al sol
igual estuvo bueno

salud queridas fusilados míos
todos rotos: ¡felicidad!
¡qué vivos estamos de tantos muertos
que nos hicieron de contragolpe!






tener razón


la teoría tiene razón en la práctica
la revolución en la rabia y
yo en vos

por eso

la conciencia es la raíz cuadrada de
vivir con malasangres y no
y este amor todas las veces que
me dejaron solo antes 
tirado a un flanco o sur de la
desolación que justo andaba por ahí
de franco a la fresca de la tarde hasta que

apareciste vos subiste de
las alcantarillas como día que
sale al día saludando y va
trabaja de sol a sol
solo como un puntero derecho o

el poema porfiado que tuvo razón en buscar 
en un silencio todo lo que
la palabra quieta inútil como
arquero que sabe cabecear 
se calla bien la boca














hilos


si la revolución fuera el cálculo que
hombres y mujeres cuentan cómodos
sentados al final de esta derrota
plácidos llorando por el país en papelitos
mientras juan cualquiera
se muere de muerte todo seco
en los fuegos de equis fiebre
debajo de puente alsina esta tarde
de 40 grados a la sombra con
los títulos de la bolsa en baja y

yo pensando aquí qué carajo
cosa misterio o qué
es la revolución
a dónde paran sus trenes
completos de una fe particular o panes
para repartir a la sombra de
los árboles donde amé a una un día
no este día u hoy porque

ahora es hora de usar
este minuto verso o próxima palabra
para pensar en la poesía verdadera
en la revolución entiéndase
que no es el coeficiente de miseria o
cálculo que hombres y mujeres
cuentan cómodos sentados
al final de esta derrota etc. sino

el corazón de la humanidad
cosido a sueños por un
triste inexplicable hilito sisal







índigos


el diario de hoy informa acerca
de los niños índigo
seres singulares sensibles que
crecen estimulados bien comidos pero

el caso del hombre de seis años de edad
descalzo sucio que parte y reparte
estampitas en el subte
¿sale en internet?

¿libros hablan sobre él como si
su supervivencia fuera
cosa espectral celeste toda mágica?
¿cómo se dice su capacidad de
aguantarse el mundo ser
a pesar de otros hombres perros que
nada tiene de espectrales celestes mágicos?

insisto: juan sin nombre
desahuciado antes de nacer
cruza de madre mal comida
con estibador desocupado o

niñísima maría la más mía
violada por conveniencia de
cartón donde dormir 
talentosa para desatar sin cortarse
bolsas de consorcio y encontrar allí
gajos de mandarina usados 
por otra sed antes
¿conciencia ecológica?

por ejemplo: si rulo o bocha
siete años por cabeza
capos de la ranchada de retiro
devotos de santa pompayera
líderes pero niños todavía
inquietos aunque duros por pastillas
de pasar la noche
a la salida del camión celular dibujan
una flor de pétalos azules –ponele- 
o trenes con alas o
“boca capo” al lado del nombre de mamá:
¿índigos? 








la pompayera


dije tu nombre para mí dentro
15 veces seguidas sin contar
tragué sin respirar el viento frío
de la noche en un banco en plaza miserere
dormí allí con putos vagos huérfanos
de todos los olvidos que
me quisieron y no entre
vómitos de vino que venció
sin embargo pompayera
nunca bajó en mí

mis ganas mías de comer dan un concierto
de sanfona amarga en el estómago
además “sos nene todavía” dicen de mí
las musas de la ciudad
ellas no me aman
más bien juegan un yo-yo particular conmigo
si me cuentan los cuentos del amor yo
les hago monadas de pichón con la navaja

desde el día que capo me la puso por   
cacho de colchón de cartón corrugado
dibujo pijas en las paredes del andén
de la calle supí que siempre que paró
llovió de nuevo











misterios


pregunto: ¿por qué en los sueños que tengo con la poesía
trabaja un hombre que talla una piedra y es de noche
y en un momento el hombre no está más
como que se cansa o se corta la luz y

después viene un silencio completamente blanco
tras lo cual entre doce y quince o más perros
ladran todos juntos a la vez
una multitud desesperada golpea una puerta y
nadie nunca abre?





























piedras


¿adónde queda el buen amor?
¿a qué hora pasa por aquí como
último subte o sol exacto de
las nueve en el país? 
¿pide moneditas bizcochos
a la salida de tus ojos?
¿raspa piedras con palitos
para ver qué sale de allí?
¿al fondo de eso rojo que sale oye
visiones de ciego cartas con secretos
del día que va a ser?
¿amarte y vos también es
lo que quedó de todo esto más
el deseo o ilusión de querernos un día
al revés de nuestras miserias fracasos
con losas de estación y
olvidos?






















los compañeros


unos escriben en la huella o marca
que dejó el pensamiento antes
ponen palabras en la brecha que
quedó tendida allí al costado u occidente de
una tristeza un sueño la ilusión

otros en cambio viven según lo que
no sufrieron y sí
piensan en consonancia a ello y
recién después lo escriben con
silencios su sangre fugas
la entrega misteriosa mágica a
un deseo derrotado desde el vamos
sin embargo a veces venceremos

la libertad mide en qué hace usted con
la rabia que le tocó contra quién cómo






















vientos

a Lito


1

como herida que aprendió a dolores
los tiempos de la lluvia
así la práctica de lito determina
la conciencia de lito

por eso unos trabajan de presos políticos
y otros de hombres mujeres que
hacen la revolución a 
la sombra del guardián
en un descuido de los pabellones

además lito se enamora
sueña viejos sueños niños 
viaja y viene y va de
la honda libertad a él
pasando por mariel y
viceversa

de puro compañero que es
lito da su cuerpo al día para
que sea noche cerrada en su cielo particular pero
sol en otra parte lejísimo de acá
en otro idioma de estaciones
opuestas por el vértice  

porque

donde este poema dice lito
los pueblos mundiales dictarán 
el nombre de sus héroes
el apellido de viento de los compañeros

ejemplo: che chávez sandino
el vino que hace la sangre de los caídos 
secándose al sol 


2

un día escribió lito en una página
que no recuerda a qué libro corresponde:
“una organización revolucionaria es, entonces,
una respuesta nueva a una situación vieja
en un nuevo momento” punto

después rajó piando piropos a
una libertad que pasaba

¿por eso toda vez que lito lloró es sopa
para calentarse en la noche de la guerra?

¿de su tierra o país de abrazos brutos besos mojados
crecen dolores dulces duras ternuras donde
todo todavía tiene que pasar?
























el río

                            a Elisa


te parecés a los silencios que empiezan
cuando cae la tarde pero más
a los silencios que empiezan
cuando cae la tarde y hablan de vos
tímidamente como vidrio conversado por
su brillo o luz de sol a la tarde
yéndose a vivir a vos
a tus partes femeninas dulces íntimas
como sombra que sube por el río y
trae peces fatigados cuerpos
una nostalgia adentro de la cual 
ocurre la confianza o fe donde
vos me amás y
toda la gente es buena





















madres


1

muerte: no morís a nadie  
segundo tu invicto es todo finito y
además sueños siguen
en los pájaros y sus pájaras de amar
en piedras que llovieron sobre
el loco corazón del mundo o compañeros
que no paran de vivir adentro de
palabras pañuelos canciones
que canta el pueblo del país al fondo suyo 
o sus rabias quemándose a la calor
del sol más último íntimo
previo a que haga noche pobrecito
en el momento o luz que pasa antes
de que suba a olor a una mujer después





















costureras


que levante la mano el que escribió

que la clase obrera había terminado o muerto

¿no vieron acaso leonas en delantal celeste
cruza de tigre y torcaza ingresando
a brukman confecciones otra vez mientras
afuera llovían tiros de goma y de verdad
más gases con perros?

por otra parte esa vez perdimos pero
eso en el fondo qué importa:
nosotros tenemos bollitos de cerámica zanón 
con más puntería que el verso tal poema cual
que enamoró de amor a la obrera costurera un día
ese día no por razones obvias

¿quién dijo quién dijo que
la revolución no corre más y
la lucha entre clases contrapuestas
menos que menos?

¿cómo se interpreta entonces
la pasión de esas mujeres
madres algunas otras no
saltando las vallas con tizas con tijeras
procurando entrar para zurcir
puntadas en trajes a medio terminar
rengos de mangas por ahora
concurridamente solas
sin patrones
preñadas para siempre
por un pueblo de hembras y varones
de pañuelos en el rostro y en las manos piedras?

ahora que levante la mano el que vio
a un triciclo ganar por penales una carrera
de mil metros contra un transatlántico: yo
un lunes del sur a la altura de abril barrio del once


lo que pasa en el país 


las crónicas del diario
hablaron del tiro en la boca
del nombre y apellido de la víctima
del cartelito cerrado por duelo
que colgaron en la puerta del supermercado
los jefes que lo despidieron pero

juan carlos molina
19 años argentino
juntado por amor con una que
esperaba un hijo suyo o con él
se mató delante de sus
compañeros echando putas
maldiciones al patrón
señor don coto

lo habían visto reponer
las góndolas esa mañana
reponer los precios agregar
centavos a la harina al pan
a los tomates hasta que

lo llamaron de personal
esa mañana para
comunicarle la decisión de
exonerarlo echarlo darle
un pase directo a la muerte
tu hijito al carajo
le dijeron sin decirle

después juan carlos molina
argentino 19 años
se reunió con él en asamblea
y votó acertarse un tiro en la boca
previamente echó maldiciones putas
rompió una computadora para
empatar los gastos en cajón 

ellos por su parte
subjefes obedientes de don coto
prolijitos eficaces
cerraron por duelo
no sin antes cobrárselo
a la cuenta de los francos de
los demás repositores los cajeros
el que corta el salame la bondiola
la chica de frutilla que convida gancia
en la puerta y dice
pase


























sueños pobres fracasos 


la palabra tiene un muñón en
la punta de la lengua o
comprensión finita

la palabra dice pero no toca
o sea la palabra no aprieta
aunque abarque  

eso sí: señala al sol para que
salga el día por allí o boca pero
la palabra no nace a nadie nunca
ningunamente  

la palabra es la palabra
y vos: vos
en representación de tus aguas
caldos tucos todos dulces
la palabra hizo silencio al
dorso de la noche
sirvió un mantel con
sueños pobres fracasos
para que empiecen a arder y
de ahí salí yo quisiéndote 
















saberes

a Diego Quintero


de ese pajarito parado
al costado de la prisión
supuran pus palabras píos que

jamás conocerás con tu
escaso estricto conocimiento o
pactos que alcanzó la sociedad en
acuerdos simposios la injusta ley o
historia que cuentan los que tienen
el poder para ellos solos

de ese pajarito sólo el preso sabe
con su entendimiento roto sí
triste también pero
iluminado por el recuerdo de

una vez que fue noviembre y
hubo sol aquí y
el que está preso ahora
amó a una antes y
acercándose el calor pensaba
rabiosamente en la revolución
fernanda fuegos para encender
la noche que ganemos











lluvias


dichos que decí me llevan llorando
por países papeles recuerdos de vos
y yo voy señora
total a esta altura de la muerte
la desgracia es un juego de mesa
el hambre y la sed se quitan chispas
uno a otra
los compañeros compañeran pero
de la revolución poco porque 

a la final los compañeros ídem
las mujeres abandonan
las palabras se callan la boca en
el momento más inoportuno
por ejemplo: ahora vos esta lluvia
que llueve en las distancias sin techito
que se abren de mi corazón para adentro

 






















madres


2

le diste partos a la patria
para despistar a los olvidos
hiciste así: rajaste de muertes derrotas
te fuiste de traidores que
corrían a contragolpe del dolor
en resumen: volviste a vos
revolución o sol como mujer
toda madre que naciste
de la ausencia un día
abriste el día por la mitad
calientemente suavísima
niña primero novia después
llena de sur con soles en los ojos
pechos y todo lo demás

 























viajes


¿como niño buscando
el ruido las noticias del mar
al fondo de un caracol?

¿así yo con tus ojos preguntando
el destino de mis sueños
la dirección de cuándo vamos a vivir?

¿como la íntima bondad
la última ventura que
crecen justo antes de partir
adentro atrás de una nostalgia que
nunca sabe a quién extraña
de dónde vino
a qué se va de aquí?























eso


siendo que nunca como en el cielo
hace buenos días
pregunto dónde hace la revolución
que ni cielo tiene pobrecita o
ilusión óptica celeste
espejo donde mirarse uno los pies sino

veces que estuví triste todo roto
cacareé y no vino nadie aquí
para colmo compañeros fueron a parar
a cárcel o la muerte y
una mujer me dejaste solo

es decir así o a golpes entendí yo que
la práctica determina la conciencia
pero vos un poco también
es decir tus ojos
donde una vez dije delirios
deseos que serán y
vos correspondiste con sueños
rabias veces que viajamos
del sur al sur y

aunque hete aquí que un día
rajaste lejos de mí
yo he de tomar una escopeta para
fusilar al rejunte de perros asesinos
que dirige el mundo y
habrá el amor de una vez
eso









primaveras


1

¿a qué fuego pertenece la tristeza de elisa
la que se para sola al fondo de su sí con
solterías en los ojos soles y tiros además?

¿entregaría su botín de boletos capicúas a la causa?
¿las canciones que toca el silencio
en sus costillas y otras partes escucharían
ahora los compañeros para calentarse los pies?

¿los pájaros piarían bajo la sombra
de sus árboles concéntricos?
¿empezaría la primavera allí o ella o
más precisamente en sus árboles corridos
del medio para acá es decir
al hueco o corazón que unos usan
para darse sangre de tomar otros olvidos en cambio
elisa reparte a todos en el sur?

¿partiría en primaveras iguales sus pedazos? 
¿daría a cada quien lo que le corresponde y
a mí además su tristeza y
todos estaríamos contentos y
no habría penas para nadie en el país excepto yo

que la quiero y en su nombre sueño
con la revolución pero
todavía falta mucho para eso aparte
golpea fuerte el frío aquí
de huesos para adentro hace rocío?


2

¿al fuego de la muerte
pertenece?
¿al del amor? ¿otros?
        
y la tristeza de elisa
lo que arde incendia
al fondo de elisa
es decir elisa: ¿sabe?
¿se quemó alguna vez 
para aprender?

y a todo esto ¿qué dirán
los profesores de bohemia 
la soledad rentable de los hombres?
¿mentiras? ¿deseos por conveniencia 
que nunca ocurrirán?
¿como yo ahora sentado ante
el silencio de la poesía
llorando con palabras mis
disputas con la tarde?

aparte
la poesía: ¿qué es?
¿una vez lloré la soledad de elisa
con el sudor de los huesos del fondo y
la poesía era eso?





















la voluntad 


hoy voy a sufrir a propósito
para ver si cambia este país  

con sacrificios propios empataré
la distancia entre realidad
y yo político  

aparte una de tres: 
yo vine aquí por
la poesía el amor o
todas las veces que perdí con
la poesía y el amor

en el fondo 
la pulpa de esta sangre siempre
es vos























muerte en la obra


por ejemplo esa mujer
que cose lana a la noche
escuchando la televisión
¿ama?

¿y ésa y esa otra que caminan
cargadas descalzas inocentes?
¿también? ¿nunca?

cuando la esposa del
obrero muerto en la vereda sepa:
¿se va a acordar que una vez
pasó el amor por su casa no ahora que
dos metros cuadrados de baldosas rotas hay
entre los doce pisos de la obra y
los pedazos de su esposo?

10 11 12 pisos en caída libre el obrero
los piolines deshilachados
la mañana en ayunas todavía
sus manos secas para siempre
un resto de cemento entre los ojos
del obrero mezclado a sangre
como la calle de barro donde
una vez se conocieron y
era camino del cerro rico en potosí
a las 7 y 45 de la tarde

la casa que hacía el obrero es para otros
la muerte es suya sola
y no es de ninguno más
ni de su esposa es
ni es de ninguno de sus hijitos
o es solamente un poco de ellos
el tiempo que tarda la muerte en
crecerle a otro como pus
después darle olvido al finado anterior y
así sucesivamente 

abajo de la pared
dueños vivirán un día
el obrero muerto nunca 
el obrero apenas si dirá con
el silencio duro de los ojos
dónde puso el último tornillo y
después se soltaron las sogas 

¿la muerte saca espuma
por la boca del obrero para que
nadie la toque?

yo cambiaría toda la poesía
del mundo y el mundo por
la vida del obrero
por una respuesta para
una pregunta cualquiera de
estas que afilan la tristeza del país

pero es inútil
lluvias vendrán y secarán a baldes
la sangre en la vereda
seguirán viniendo de bolivia obreros 
ilegales malcomidos imperfectos
una virgen de copacabana subirán
con sigo a las alturas pero el casco no

por su parte esa mujer que
cose lana a la noche escuchando
la televisión
esperará hasta que sea necesario
calentará hasta tres veces
lo que sobró del mediodía

que la muerte es imprudente -pensará-
que llega después de medianoche
y con un grito como de silencio profundo
y que empieza cuando acaba la transmisión
y los grillos cantan y
la muerte del esposo es prenda
que salió en berlín


semejanzas


yo le escribo cartas a la mujer que amo y
a todo esto llueve
además ella rajó lejos ayer 

es decir ¿la realidad pasa al lado de todas
las veces que el pueblo luchó y
lo mataron puntualmente en las esquinas pero
a la poesía no le importa nada de eso
al pueblo tampoco y sale a la calle igual?

estoy diciendo: ¿yo le escribo cartas a
la mujer que amo y llueve y
seguimos haciendo cola ante
los vencimientos del dolor y la mañana
viene a la mañana siguiente y canta
en pajaritos que pían parados en
árboles todos meados por los perros?  

¿qué tiene que ver o adónde se juntan
los perros que mean los árboles
donde los pajaritos cantan etc. y
vos?

¿los pernos que atan tiempo y realidad
fueron usados por otros antes?
¿tienen dulces óxidos encima?
¿se mojaron con los sueños
de lo que no pasó todavía como
la carta que yo escribí para vos ayer
cuando rajaste lejos y
toda la noche quedó pidiendo pan piedad
que vuelvas a su silencio
encima de la mesa?

con la revolución el destino de
los compañeros: ¿igual?
¿la vida tiene lógicas que giran
para el mismo lado?
¿como todo lo que le pasa a
lo que pesa arriba de la gravedad?
gerundios  


algo hay que decir de fernando
que se llamaba en gerundio para
no quedarse quieto una vez

iba con posiciones anarquistas a
las reuniones del consorcio pero 
lo importante es que fernando era triste
o como esos tristes que aprovechan la situación 
aunque es seguro: un hombre solitario

las últimas veces de sí le sabía salir
una mujer en el ojo
saludaba como un cantor y
después se iba al fondo de fernando
al iris suyo donde pensaba contra lo que hubo de ver

quería aprender todo de una sola vez –decía-
pero es que venía de la socialdemocracia
se vestía de largo para mirar
películas sobre la guerra civil

lo cargábamos por eso y
la que se enojaba era ella
a esa altura el pobre de fernando
ya había subido al cielo varias veces seguidas
pero de eso nunca quiso contar   
tenía más secretos que un bajista

“que te calles” le pedía la otra
dejándose crecer un orzuelo
total que no pasó nada
lo alcanzó a querer una sola mitad del todo
si le habrá tocado candombes fernando
en esas circunstancias pero
ella era más terca que un toro conversado
por un atardecer de sol y así duró

o así duró fernando que una vez cualquiera
de un día conocido dijo hasta mañana y
después se fue solito al mato grosso con
estrellas plátanos casetes tdk y

cada vez que piensa en la revolución
nos damos cuenta porque llueve  





































desencuentro


1

la palabra que nombra a los
compañeros: ¿sabe bien de qué
misterio está hablando? ¿qué
cielo toca con la punta de los dedos
o tormenta? ¿metió los pies adentro de
este frío? ¿se quemó para saber?
¿usa esta esperanza por usar?

¿qué hacía la poesía esa vez
agachada en la vereda?
¿escuchaba el olor a rabia que
saca la lluvia cuando raspa la calle?
¿hizo eso en vez de vos?
¿contra tuya?


2

los martillos golpean pero
a mí me lastimaste vos
abriste una grieta en el by-pass
con precisión de trapecista
estoy completamente herido
me sobran pobrezas

a veces hay que saber ponerse
el saco a tiempo y salir de aquí
esta noche que llueve mucho afuera
después: caminar andar por las distancias al revés

ahora estoy ciego de esta luz
te compré un vestido todo rojo y
por última elegancia te sacaste
los zapatos señora



sobre los poetas


de un tiempo a esta parte
todos quieren ser poetas
especialmente los solos
los tristes y también los poetas   

esas cosas

hechos situaciones que pasan a
esta altura dura del mundo
cuestión que todos quieren
ser poetas y no saben nada
no de poesía

cualquiera se acuerda las edades de rimbaud
no es hazaña conocer la
cadencia del silencio
sostener una conversación sobre retórica
volver oscura la voz para nombrar
los versos del húngaro pero

nadie especialmente los solos
los tristes y menos los poetas
saben nada de la vida pobre que sufrió
el que se ponía a pensar
palabras a la noche
solo de soledad
con solterías al fondo de su sí
acompañado de mujer mientras tuvo  

nunca nadie pudo verlo feliz
tenía los puños crispados rojos de
tanto golpear contra
el sueño las sábanas

donde hubiera un imposible
ahí búsquenlo a él
si había un combate decía que sí
cuando la ilusión llamaba al frente
él levantaba la mano
le gustaba quedarse atrás de todo
buscando el parecido de las cosas
acordándose recuerdos de lo que
va a pasar 

pero hete aquí que un día
lo dejó su mujer
y después otras sucesivas
ellas se cansaron de su desinterés
de su cortesía como descuidada o vieja  
no le perdonaban sobre todo que
no ganara ni para el alquiler

él decía que salía de mañana a trabajar y
una soledad siempre distinta
lo distraía en la esquina
una vez escribió que nunca quiso ser poeta
pero ruidos del mundo vinieron a su noche
y no le dejaron dormir el sueño en paz 

todavía le tiran del brazo -dice-
se levantan la pollera para mostrarle
dónde termina el infinito y
él que es terco no quiere mirar



















¿qué fue?


la palabra revolución parece
las partes del amor crecidas
en la edad del pavo 

¿qué fue de las mamíferas que
se paseaban con angelitos de la mano
yendo a trabajar primero
a combatir después a amar
de noche con las sobras del
cuerpo las migas de mujer que
dejaban los tiros por entre los
pies rotos propiamente
las clavículas clavadas al sol
de la tierra arrasada?

fuego afónico
pólvoras mojadas de humedad:
¿apuntan suaves todavía?
¿prenden la calefacción del cuarto
donde una mujer y un hombre duermen ahora
después de haberse amado en delegación
de toda la rabia detenida en el sur
las pasiones que crecen como
leopardas que pasaban dulces por aquí?

y la tormenta de solos que
hay lloviendo por los 4 costados
del país: ¿dónde escribe sus poemas
de amor? ¿con qué lapicito sin punta?
¿en cuál papel amarillo caído a tiros
de un cuaderno del segundo grado
que el país repitió







nada más


quisiera tocar el fondo de las cosas
con una palabra
entrar sorprendido a una casualidad  
encontrar ese lugar donde hombres negros venidos
del áfrica meridional cuelgan
sábanas amarillas calientes de luz y
ahí mismo empieza el sol 

yo quisiera todo eso y
otras cosas parejas
ejemplo: decir tu nombre y que llueva
sobre nosotros dos solamente
se rompan a rayos nuestro techo lleno
de sur un domingo y 
las paredes como patios donde creí
en la revolución y

que sobre el silencio que quede
dejés apoyado un tango cualquiera y
después me querías 

y nada más

















la calesita     

El espíritu sólo triunfará en sus
manifestaciones más peligrosas. Ninguna audacia intelectual puede conducir a la muerte.

Paul Eluard



lo que eluard pensó
lito hizo a costa de
su sangre o sí mismo más
ciertos alrededores suyos
femeninos dulces íntimos
mariel sin ir más lejos e
hijos también

ahora es viento

“la igualdad no existe más que en
un deseo común de libertad”
(eluard de nuevo)
“eso es” dijo lito al respecto “así así dale”
y levantó vuelo después en su mano
con énfasis ósculos en sístoles
de su corazón de caballo

enseguida: subió a la calesita picaneada del país
rompió el candado del zaguán y
así entró al día
saludando sortijamente con los ojos









dialécticas

                            a Oscar Palacios


primero tuvieron razón las canciones
los rostros de trabajadores según carpani
con su tonelada o dos de peso
después el materialismo histórico y
                
más antes todavía la poesía
huasi el triste y nacho que adónde
habrá ido a parar con su
hipocondría sentimental

recién más tarde las teorías de la revolución pero
el kilómetro cero fueron las canciones
el poema ese de los compañeros que
no habían leído el capital y pensaban
sin embargo cómo batir al enemigo y

enseguida nomás vos
una mañana que prometí
victorias populares para vengar
tu noche mal habida

no obstante la culpa de todo esto
la tienen las canciones y
ahora que pienso como un profesor
el dato objetivo es una tarde que
boca perdió el campeonato por penales
y yo lloré
lo que supone rabias
una euforia incontenible 
penas puestas del revés donde
mi yo concurrido o pueblo
vamos a ganar